Derivado de las nuevas disposiciones aprobadas dentro de las reformas laborales vigentes a partir de este año en México, las instituciones y compañías con trabajadores en nuestro país deben atender bajo las condiciones de una norma oficial mexicana específica, los riesgos psicosociales que ocurren para sus trabajadores acorde a sus funciones.

En el contexto organizacional, los riesgos psicosociales son aquellos patrones de interacción entre el individuo y su entorno que hacen aumentar las posibilidades de un deterioro del bienestar psicológico de las personas y en la calidad y cantidad de su trabajo. La salud psicológica y el rendimiento son elementos que van unidos, y por ello las empresas que toman medidas para prevenir los riesgos psicosociales gozan de varias ventajas.

Los puestos de trabajo bien diseñados, con un nivel de demanda y un control adecuado, así como una determinada libertad de decisión, reducen la posibilidad de sufrir estrés.

Los planes de formación y las reuniones sobre la organización del trabajo ayudan a los trabajadores a estar más orientados y tener claro los objetivos.

El liderazgo es una medida preventiva referente a los cambios de dirección. En lo que respecta a la prevención de riesgos se pretende encontrar las habilidades para reconocer los conflictos y sabes manejarlos. Es muy importante se capaz de detectar señales de mobbing para cortarlos cuanto antes.

Respecto a los estándares morales de la empresa, no solo es suficiente contar con un equipo formado en Prevención de Riesgos Laborales. Hay que intentar crear una «Cultura Empresarial». Hay que involucrar a los trabajadores en una dinámica de interacción integral bajo acciones específicas:

·         Incorporando nuevos valores a la cultura empresarial que se lleven a cabo desde arriba hacia abajo. Establecer previamente la política Preventiva en materia de violencia conjuntamente con una implicación real de la dirección de la empresa contribuirá al cambio cultural que buscamos. De esta manera los conflictos, por ejemplo, llegara a una resolución óptima.

·         Crear un código de conducta. Dejando claro conductas no permitidas y posibles sanciones.

·         Mejoras continuas en los sistemas de comunicación en la empresa. Facilitar información a los trabajadores de forma ágil y clara.

·         Tener un protocolo de resolución de conflictos que proteja la posición social de una potencial víctima.